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El gobierno colombiano del presidente Gustavo Petro emitió un comunicado este viernes informando que el jueves entregó al embajador de Israel en Bogotá, Gali Dagan, una nota formal anunciando la ruptura de relaciones diplomáticas. La Dirección de Protocolo de la Cancillería de Colombia coordinará el proceso y los plazos para la salida del personal diplomático israelí.
Además, se confirmó al embajador la intención de mantener activas las secciones consulares respectivas en Tel Aviv y Bogotá. Esta decisión se tomó en respuesta a las agresiones de Israel en la Franja de Gaza, que han resultado en la muerte de más de 34 mil personas, desplazamientos y hambruna, según confirmó el canciller colombiano, Luis Gilberto Murillo, tras el anuncio de Petro el miércoles pasado.
Desde el año pasado, el mandatario de Colombia viene denunciando las acciones del Estado de Israel como genocidio y había advertido sobre la posible ruptura de relaciones diplomáticas si Israel no cumplía con el alto el fuego respaldado por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, como finalmente acaba de concretar.
Saludamos la medida del gobierno colombiano, un típico progresismo nacionalista burgués latinoamericano, que así y todo en este caso debería ser imitado por todos los Estados del mundo, así como llamamos al boicot, sanciones económicas y todas las medidas pertinentes contra el régimen genocida de Netanyahu hasta que detenga su masacre y política de apartheid contra los palestinos.