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(Candidato asesinado Fernando Villavicencio)
A poco de las elecciones extraordinarias del 20 de agosto en Ecuador convocadas tras el juicio político al banquero-presidente Guillermo Lasso para elegir quién será el sucesor que completará el período constitucional 2021 – 2025, una serie de asesinatos y hechos de violencia han alterado el clima, el último de los cuales y más llamativo es el acribillamiento en plena campaña en la vía pública del candidato presidencial Fernando Villavicencio.
Anteriormente, grupos irregulares habían asesinado al alcalde de Manta, Agustín Intriago; a la deportista Ariana Chancay y a otras treinta personas, y en distintos penales presidiarios se organizaron motines carcelarios, sucesos que han generado un debate sobre la inseguridad que azota al país.
A Lasso le quedan pocas semanas en el poder y su capacidad para enfrentar el tema es acotada. Estuvo más ocupado antes de su salida en imponer reformas tributarias que favorezcan a ciertos sectores. En los comicios también se elegirá a parlamentarios para completar el período legislativo ya que Lasso, al convocar a estas eleciones extraordinarias conocidas con el nombre de "muerte cruzada", disolvió el parlamento.
Todos los espacios asumen que el principal problema que deberán enfrentar de acceder al gobierno es el de la inseguridad ciudadana, algo novedoso en la política ecuatoriana, más acostumbrada a afrontar crisis sociopolíticas y levantamientos indígenas, pero no el auge delictivo.
Los ocho candidatos presidenciales de Ecuador proponen mantener la dolarización, que rige en el país desde 1999, implementada por el ex presidente Jamil Mahuad.
La favorita según los sondeos, Luisa González, del espacio Revolución Ciudadana, del ex presidente Rafael Correa, también aseguró que mantendrá ese sistema monetario y lo "fortalecerá".
Villavicencio, el candidato asesinado, periodista y ex miembro de la Asamblea Nacional disuelta en mayo, aparecía segundo en la intención según los sondeos. Cobró notoriedad en la política ecuatoriana denunciando casos de corrupción, primero como periodista y luego como legislador.
Otro aspirante es el outsider Jan Topic, que lanzó su candidatura recurriendo a un lenguaje populista de derecha de "mano dura", con especial énfasis en el tema de la seguridad, por lo que podría verse favorecido por esta ola de violencia.
Desde el movimiento indigenista aparece la candidatura de Yaku Pérez.
En un clima de fuerte apatía política y altos niveles de indecisión, que últimamente se ha visto caldeado por resonantes casos de violencia, poco más de trece millones de ecuatorianos podrán acudir a las urnas para elegir presidente y vicepresidente, y a 137 miembros de la Asamblea Nacional. Si ningún candidato presidencial supera el 40 por ciento y 10 puntos de diferencia con el segundo, deberá realizarse un ballotage el 15 de octubre, lo que todo parecería indicar que sucederá.